La Vieja Cuaresmera es la representación gráfica del tiempo cuaresmal, que va del Miércoles de Ceniza hasta el Jueves Santo, día en que se inicia la Pascua Cristiana. Sus siete piernas representan las siete semanas que abarca, mientras que el bacalao seco y el cesto lleno de verduras y arenques que lleva consigo recuerdan la obligación de guardar ayuno de carne, huevos y leche a todos los cristianos. En España, la tradición manda tener colgada una Vieja Cuaresmera de papel en la cocina, a la que se le van arrancando las piernas según van pasando las semanas, y termina quemada en el fuego el Domingo de Pascua.
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