Además de un edificio modernista extraordinario, el Palau de la Música es uno de los principales auditorios musicales de Barcelona. Dentro de este proyecto nos hemos encargado del diseño de su Identidad Corporativa y durante años hemos desarrollado una comunicación contemporánea que combina tradición y futuro, dirigida a audiencias más amplias.
Identidad
La complejidad de este proyecto radicaba en unir en una única marca a dos instituciones: el auditorio del Palau de la Música y el Orfeó Català, su propietario. Inspirándonos en su singular arquitectura creamos un nuevo símbolo que remite gráficamente a las formas de la notación musical y al carácter floral del edificio modernista, concebido como un gran jardín.
Vídeo en colaboración con Åkerblom.
Comunicación
Desde hace más de ocho años colaboramos también con diferentes artistas contemporáneos para llevar a cabo las campañas de comunicación, creando un lenguaje actual y dinámico adaptable a soportes en línea y offline.
2023/24
La campaña de este año se ha nutrido de la obra de Entangled Others, un dúo de artistas digitales que han creado una serie de imágenes florales generadas por Inteligencia Artificial (IA) inspiradas por la naturaleza de la arquitectura del Palau y que conmemoran el cumpleaños de su arquitecto, Lluís Domènech i Muntaner.
2022/23
En esta temporada, colaboramos con la creadora digital Anna Carreras desarrollando un lenguaje visual basado en el píxel como recreación contemporánea de la ornamentación y estética modernista y que generó el hilo conductor de toda la temporada.
2020/22
Junto con la artista digital Alba G Corral, que trabaja a partir de código, se creó la nueva imagen de campaña inspirada en las diferentes perspectivas y miradas de la nueva temporada. Para reforzar la presencia digital del Palau se creó un microsite interactivo que contenía toda la programación y otros contenidos complementarios.
Web temporada 2020/21
2019/20
En la temporada 2019/2020 y en las anteriores, colaboramos con diferentes artistas plásticos como Miquel Barceló, Antoni Llena o Joan Fontcuberta, reforzando la idea del Palau como centro cultural, aportando unos valores añadidos que van más allá de la excelencia musical.